martes, abril 11, 2017

Tout S'En Allait


Il y avait de faibles femmes
et puis des femmes faciles
et des femmes fatales
qui pleuraient hurlaient sanglotaient
devant des hommes de paille
qui flambaient
Des enfants perdus couraient dans des ruines de rues tout blêmes de savoir qu’il ne se
retrouveraient jamais plus
Et les chefs de famille
qui ne reconnaissaient plus le plancher du plafond
voletaient d’un étage à l’autre
dans une pluie de paillassons de suspensions de petites cuillers et de plumes d’édredon
Tout s’en allait
La ville s’écroulait
Grouillait
S’émiettait
en tournant sur elle-même
sans même avoir l’air de bouger
Des cochons noirs aveuglés
dans la soudaine obscurité
d’une porcherie modèle désaffectée
galopaient
La ville s’en allait
suant sang et eau
gaz éclaté
Ceux qui n’avaient rêvé que plaies et bosses
se réveillaient
décapités
ayant perdu peignes et brosses
et autres petites mondanités
Une noce toute noire morte sur pied
depuis le garçon d’honneur jusqu’aux mariés
gardait un équilibre de cendre figée
devant un photographe
torréfié terrifié
Nouvelles ruines toutes neuves
hommage de guerre
jeux de reconstruction
profits et pertes
bois et charbons
Sur le dernier carré d’une maison ouvrière
une omelette abandonnée
pendait comme un vieux linge
sur une verrière brisée
et dans les miettes d’un vieux lit calciné mêlés à la sciure grise d’un buffet volatilisé
la viande humaine faisait corps-grillé avec la viande à manger
Dans les coulisses du progrès
des hommes intègres poursuivaient intégralement la désintégration progressive
de la matière vivant
désemparée.






Jacques Prévert



lunes, abril 10, 2017

Todo Se Iba


Había mujeres débiles,
y además mujeres fáciles
y mujeres fatales
que lloraban gritaban sollozaban
delante de hombres de paja
que ardían
Niños extraviados corrían por calles en ruinas
muy pálidos al saber que nunca más volverían a encontrarse
Y jefes de familia
que ya no distinguían el suelo del techo
revoloteaban de un piso al otro
en una lluvia de felpudos de lámparas de cucharillas y de plumones
Todo se iba
La ciudad se desmoronaba
bullía
se desmenuzaba
y giraba sobre sí misma
sin que pareciera moverse
Unos cerdos negros cegados
en la súbita oscuridad
de una pocilga moderna en desuso
galopaban
La ciudad se iba
sudando sangre y agua
envases de gas reventados
Los que sólo soñaron en heridas y golpes
se despertaban
decapitados
habiendo perdido peines y cepillos
y otras cositas mundanas
Una boda muy negra muerta de pie
desde el padrino hasta los novios
conservaban un equilibrio de ceniza petrificada
frente a un fotógrafo
torrado aterrado
Ruinas recientes totalmente nuevas
homenaje de guerra
juegos de rompecabezas
ganancias y pérdidas
leña y carbón
En l0 que quedaba de una casa de obreros
una tortilla abandonada
colgaba como ropa vieja
sobre un ventanal roto
y en las migajas de un viejo lecho calcinado mezcladas con el
serrín gris de un armario volatilizado
la carne humana se incorporaba al asado de carne comestible

En las bambalinas del progreso
hombres íntegros proseguían integralmente la desintegración
progresiva de la materia viva
desamparada.






Jacques Prévert

Traducción de Aldo Pellegrini


viernes, abril 07, 2017

Nunca entendí lo que es un laberinto...


Nunca entendí lo que es un laberinto
hasta que cara a cara con mí mismo
perfil hurgara en el espejo matutino
con que me lavo el polvo y me preciso.

Porque así somos más de lo que fuimos
a la orilla del sol alado y fino:
de sangre reja y muro bien vestidos
de moho y vaho y rata amados hijos.























Roque Dalton


lunes, abril 03, 2017

Las Canciones Más Bellas


Juzga por ti mismo si vale o no la pena
transitar a toda prueba esta senda tenebrosa.
Infiere si en verdad importa seguir la absurda
línea por los astros propuesta. Y verifica si aún
es cierto el milagro desastroso de la existencia.

Ve y únete a todas las cosas junto a ti dispuestas,
y marcha en pos de la penumbra de las noches
y de los días borrosos por el paso de la niebla.

Evoca desde tus labios las canciones más bellas
de tierras muy lejanas. Entiende con entereza
que ésta es la vida y éste tu destino; y, apresúrate
a su encuentro: hojas son barridas por el viento.



Fotografía de Duván Carvajal Restrepo



Jandey Marcel Solviyerte



Más Que Un Consejo, Amigo


Aléjate lo más que puedas del mundillo banal;
no es esa ruta infame la que ha de llevar tu paso.
La marea no detiene su curso al estrellar las playas,
ni se impide cuando es propicio el pasto para la sed
del fuego el voraz incendio que arrasará la cosecha.
Un deber profundo tienes que omite todo desvío,
y aun, sin tu arbitrio, inexorable te arrastra a cumplirlo.
Lo más que puedas, aléjate, del mundillo banal.






Jandey Marcel Solviyerte



martes, marzo 28, 2017

Adiós


Un día más, sólo un minuto más, para estar vivo
y despedirme de cuanto amé.
Para decir adiós a las cosas que vi y toqué mientras moría
desde el instante mismo en que nací.
Y vino el niño con el premio que sacó en el colegio por su
sabiduría,
y el ala de la gaviota golpeando en lo infinito con su vuelo,
vino la cabellera derramada y el rostro de la misteriosa
mujer que estuvo a mi lado, en el lecho, sin que yo lo supiera,
y el río con su lenta corriente musculosa
a través de cada mueble, cada objeto y cada gesto
de quien me ve parir, ¡oh Dios mío!

Un instante más aún en el suelo que pisé,
en el aire de mi respiración
sofocada por el amor, en los vestigios de la pasión,
con cuanto -mosca o sol- me deslumbró en este extraño
planeta, donde perdure año tras año, presintiendo
este límite de espumas, este revuelto torbellino
de la despedida, yo, que tanto fui deslumbrado
por centelleante atracción de la tierra,
por cuanto fue caricia o solamente un espejismo del mundo
es mi destino.

Así, pues, despidiéndome de los caballos, de la canoa,
los pájaros, el gato y sus costumbres. Déjame
una vez más mirar las flores y la lluvia. Es éste
el trágico instante en que uno descubre
el delirio misterioso de las cosas, sus raíces secretas,
el instante supremo de decir adiós.
a cuanto se adoró en esta vida.






Enrique Molina



sábado, marzo 25, 2017

Adieu To A Soldier


Adieu, O soldier! 
You of the rude campaigning, (which we shared,)
The rapid march, the life of the camp,
The hot contention of opposing fronts- the long manoeuver,
Red battles with their slaughter,- the stimulus- the strong, terrific
game,
Spell of all brave and manly hearts- the trains of Time through you,
and like of you, all fill'd,
With war, and war's expression.

Adieu, dear comrade!
Your mission is fulfill'd- but I, more warlike,
Myself, and this contentious soul of mine,

Still on our own campaigning bound,
Through untried roads, with ambushes, opponents lined,
Through many a sharp defeat and many a crisis- often baffled,
Here marching, ever marching on, a war fight out- aye here,
To fiercer, weightier battles give expression.






Walt Whitman





miércoles, marzo 22, 2017

Vientos Del Pueblo Me Llevan


Si me muero, que me muera
con la cabeza muy alta.
Muerto y veinte veces muerto,
la boca contra la grama,
tendré apretados los dientes
y decidida la barba.
Cantando espero a la muerte,
que hay ruiseñores que cantan
encima de los fusiles
y en medio de las batallas.





Miguel Hernández & Pabellón de Palabras & Vientos Del Pueblo Me Llevan



Miguel Hernández



martes, marzo 21, 2017

The Season Of Phantasmal Peace


Then all the nations of birds lifted together
the huge net of the shadows of this earth
in multitudinous dialects, twittering tongues,
stitching and crossing it. They lifted up
the shadows of long pines down trackless slopes,
the shadows of glass-faced towers down evening streets,
the shadow of a frail plant on a city sill—
the net rising soundless as night, the birds' cries soundless, until
there was no longer dusk, or season, decline, or weather,
only this passage of phantasmal light
that not the narrowest shadow dared to sever.

And men could not see, looking up, what the wild geese drew,
what the ospreys trailed behind them in silvery ropes
that flashed in the icy sunlight; they could not hear
battalions of starlings waging peaceful cries,
bearing the net higher, covering this world
like the vines of an orchard, or a mother drawing
the trembling gauze over the trembling eyes
of a child fluttering to sleep;
                                                    it was the light
that you will see at evening on the side of a hill
in yellow October, and no one hearing knew
what change had brought into the raven's cawing,
the killdeer's screech, the ember-circling chough
such an immense, soundless, and high concern
for the fields and cities where the birds belong,
except it was their seasonal passing, Love,
made seasonless, or, from the high privilege of their birth,
something brighter than pity for the wingless ones
below them who shared dark holes in windows and in houses,
and higher they lifted the net with soundless voices
above all change, betrayals of falling suns,
and this season lasted one moment, like the pause
between dusk and darkness, between fury and peace,
but, for such as our earth is now, it lasted long.






Derek Walcott


viernes, marzo 17, 2017

Alone

Lying, thinking
Last night
How to find my soul a home
Where water is not thirsty
And bread loaf is not stone
I came up with one thing
And I don’t believe I’m wrong
That nobody,
But nobody
Can make it out here alone.

Alone, all alone
Nobody, but nobody
Can make it out here alone.

There are some millionaires
With money they can’t use
Their wives run round like banshees
Their children sing the blues
They’ve got expensive doctors
To cure their hearts of stone.
But nobody
No, nobody 
Can make it out here alone.

Alone, all alone
Nobody, but nobody
Can make it out here alone.

Now if you listen closely
I’ll tell you what I know
Storm clouds are gathering
The wind is gonna blow
The race of man is suffering
And I can hear the moan,
Cause nobody, But nobody
Can make it out here alone.

Alone, all alone
Nobody, but nobody
Can make it out here alone.








Maya Angelou



jueves, marzo 16, 2017

Do Jeito Que O Rei Mandou


Sorria!
Meu bloco vem bem, descendo a cidade
Vai haver Carnaval de verdade
O samba não se acabou

Sorria!
Que o samba mata a tristeza da gente
Quero ver o meu povo contente
Do jeito que o rei mandou


Bate lata, bate surdo
Agogô e tamborim
Bate fundo no meu peito
Um amor que não tem fim
E pra não cair da escada
Bate o prego, meu senhor
Bate o pé, mas bate tudo
Do jeito que o rei mandou.










João Nogueira




Para Bárbara


Acuérdate Bárbara
Llovía sin cesar en Brest aquél día
Y marchabas sonriente
Dichosa embelesada empapada
Bajo la lluvia

Acuérdate Bárbara
Llovía sin cesar en Brest
Y me crucé contigo en la calle de Siam
Sonreías
Y yo también sonreía

Acuérdate Bárbara
Tú a quién yo no conocía
Tú que no me conocías
Acuérdate
Acuérdate pese a todo aquél día
No lo olvides

Un hombre se cobijaba en un portal
Y gritó tu nombre
Bárbara
Y corriste hacia él bajo la lluvia
Empapada embelesada dichosa
Y te echaste en sus brazos

Acuérdate de eso Bárbara
Y no te ofendas si te tuteo
Yo tuteo a todos los que amo
Aunque los haya visto sólo una vez
Tuteo a todos los que se aman
Aunque no los conozca

Acuérdate Bárbara
No olvides
Esa lluvia buena y feliz
Sobre tu rostro feliz
Sobre esa ciudad feliz
Esa lluvia sobre el mar
Sobre el arsenal
Sobre el banco d'Ouessant

Oh Bárbara
Menuda estupidez la guerra
Qué has llegado a ser ahora
Bajo esta lluvia de hierro
De fuego de acero de sangre
Y el hombre aquel que te estrechaba entre sus brazos
Amorosamente
Quizás ha muerto o desaparecido o vive todavía

Oh Bárbara
Llueve sin cesar en Brest
Como solía llover en otro tiempo
Pero no es lo mismo y todo está estropeado
Es lluvia desconsolada de duelo espantoso
Ni siquiera es ya tormenta
De hierro de acero de sangre
Simplemente nubes
Que revientan como perros
Perros que desaparecen
En el remanso de Brest
Y van a pudrirse lejos
Lejos muy lejos de Brest
Donde ya no queda nada.




El puerto destruido en 1944. (Archivos de Brest)


Jacques Prévert

Versión de C. Deplois




Barbara


Rappelle-toi Barbara
Il pleuvait sans cesse sur Brest ce jour-là
Et tu marchais souriante
Épanouie ravie ruisselante
Sous la pluie
Rappelle-toi Barbara
Il pleuvait sans cesse sur Brest
Et je t'ai croisée rue de Siam
Tu souriais
Et moi je souriais de même
Rappelle-toi Barbara
Toi que je ne connaissais pas
Toi qui ne me connaissais pas
Rappelle-toi
Rappelle-toi quand même jour-là
N'oublie pas
Un homme sous un porche s'abritait
Et il a crié ton nom
Barbara
Et tu as couru vers lui sous la pluie
Ruisselante ravie épanouie
Et tu t'es jetée dans ses bras
Rappelle-toi cela Barbara
Et ne m'en veux pas si je te tutoie
Je dis tu à tous ceux que j'aime
Même si je ne les ai vus qu'une seule fois
Je dis tu à tous ceux qui s'aiment
Même si je ne les connais pas
Rappelle-toi Barbara
N'oublie pas
Cette pluie sage et heureuse
Sur ton visage heureux
Sur cette ville heureuse
Cette pluie sur la mer
Sur l'arsenal
Sur le bateau d'Ouessant
Oh Barbara
Quelle connerie la guerre
Qu'es-tu devenue maintenant
Sous cette pluie de fer
De feu d'acier de sang
Et celui qui te serrait dans ses bras
Amoureusement
Est-il mort disparu ou bien encore vivant
Oh Barbara
Il pleut sans cesse sur Brest
Comme il pleuvait avant
Mais ce n'est plus pareil et tout est abimé
C'est une pluie de deuil terrible et désolée
Ce n'est même plus l'orage
De fer d'acier de sang
Tout simplement des nuages
Qui crèvent comme des chiens
Des chiens qui disparaissent
Au fil de l'eau sur Brest
Et vont pourrir au loin
Au loin très loin de Brest
Dont il ne reste rien.




Le port détruit en 1944 (Archives de Brest)


Jacques Prévert